Por Gissel Mussa, coach de Coaching Sostenible.

Qué pregunta tan recurrente. ¿Verdad?

Cómo si para ser feliz existiera una fórmula única que resultara para todo el mundo por igual.
Actualmente en esta era digital, nos bombardean con decenas de gurús que nos dicen, dónde, cómo y cuándo ser felices.

Probablemente SER FELIZ se ha convertido en una obligación, además de un sueño, y hasta una quimera a la que vamos persiguiendo.

La cuestión está en que tenemos tendencia en buscar la felicidad fuera, debido a la creencia de que cuando termine la carrera seré feliz, cuando tenga mi casa y un coche, cuando tenga un hijo o hija, o me case, etc, finalmente seré feliz.
Pero siempre con la idea de que la felicidad está fuera, como si cada uno de nosotros no tuviéramos nada que ver con ello.

Por esta razón, qué sucede si te preguntas:
¿Qué estoy haciendo para alejarme de felicidad?
Y ¿De qué manera puedo acercarme a la felicidad?

Te propongo una experiencia, coge tu móvil, quita la función de embellecedor y hazte una foto.
Observa, qué imagen te devuelve el móvil.
¿Qué piensas de ella? ¿Qué sientes cuando ves esta foto sin embellecedor?

Esa foto es un espejo de ti, es la realidad, eso lo que hay, la pregunta es ¿Qué quieres hacer con eso qué hay?

Para despertar de ese sueño y dejar de perseguir la quimera, te propongo parar. Mira hacia adentro, escucha con el deseo de encontrar lo que hay dentro de ti.
Todo lo que es afuera es adentro, ésta es la ley de la correspondencia.

Si lo que hay fuera y lo que vemos es infelicidad a nuestro alrededor, pregúntate: ¿Qué estoy haciendo yo para que eso sea así?

Finalmente reflexiona acerca de qué estás reflejando, qué estás transmitiendo, de qué manera te estás relacionando con la vida.

Encontrar la respuesta acerca de si existe la felicidad depende de ti y solo de ti. ​

Lo único que tienes el poder de cambiar es a ti mismo. Para cambiar la ley de la correspondencia, busca en tu interior, ponle nombre a lo que te sucede y acepta lo que hay.

Por consiguiente si lo quieres es cambiar, tú puedes tomar la decisión de cambiar las gafas con las que miras la vida. Ese es el primer paso.

Si encontrar estas respuestas te resulta complejo, me comprometo a acompañarte en un proceso de coaching, para que tú descubras las respuestas que necesitas.

Gissel Mussa